En nuestro último artículo te pusimos al día de las nuevas medidas del Gobierno para suavizar la constante subida de la luz. Hoy, hemos decidido ampliar un poquito más esa información, y vamos a contarte todo lo que necesitas saber sobre el Bono Social de Electricidad. Se trata de una ayuda para los colectivos más desfavorecidos que, a raíz de la crisis del Covid-19, ha extendido su cobertura.
¿Quieres saber si cumples los requisitos para recibir esta bonificación? ¡Pues toma nota!
No es solo pagar menos por tu factura de la luz
En esencia, el Bono Social es un descuento que el Gobierno aplica en la factura eléctrica. La bonificación recibida es mayor o menor en función del tipo de consumidor. El objetivo es que la pobreza energética no llegue a los colectivos más desprotegidos, y muchas familias en España pueden disfrutar de la energía a un precio más accesible gracias a él.
Pero pagar menos por la electricidad no es el único beneficio del Bono Social. Los usuarios que lo disfrutan reciben facturas más sencillas y disponen de más tiempo para ponerse al día en caso de impago. Además, en caso de haber menores, discapacitados o personas con un alto grado de dependencia, se prohíbe la interrupción del suministro a la unidad familiar, por lo no podrían quedarse sin electricidad.
Pero, ¿qué requisitos hay que cumplir?
El Bono Social de Electricidad sólo puede aplicarse a aquellos consumidores que tengan contratada la tarifa eléctrica regulada PVPC. Además, la potencia contratada no podrá superar los 10 kW. Por otro lado, el usuario tendrá que ser considerado consumidor vulnerable.
Para saber si perteneces a este colectivo, debes comprobar si cumples al menos una de estas tres condiciones.
Renta anual respecto al IPREM
Solo podrán recibir la ayuda aquellas personas cuya renta anual se encuentre dentro de los siguientes márgenes:
Las circunstancias especiales que se contemplan son:
- Que algún miembro de la unidad familiar tenga discapacidad. Además, esta debe ser igual o superior al 33%.
- Que entre los miembros de la unidad familiar haya al menos uno víctima de violencia de género o terrorismo.
- Que exista situación de dependencia reconocida de grado II o III por parte de alguno de los integrantes de la unidad familiar.
- Que se trate de una familia monoparental con, al menos, un menor.
A raíz de la aparición del COVID-19, desempleados, trajadores en ERTE y empresarios cuyos ingresos se hayan visto muy disminuidos pueden acogerse a esta condición. ¡Pero mucho ojo! La ampliación solo es efectiva hasta finales de marzo de 2022.
Si quieres consultar los datos actuales sobre el IPREM puedes hacerlo en el BOE del 29 de Diciembre del año pasado.
Recibir la pensión mínima
Es decir, que el solicitante o todos los miembros de la unidad familiar sean pensionistas que reciban la pensión mínima. Los ingresos ajenos estarán permitidos siempre y cuando no superen los 500€.
Condición de familia numerosa
Todas las familias numerosas sin excepción se consideran consumidores vulnerables.
Más ventajas para quienes más lo necesitan
Si los consumidores vulnerables se encuentran en situaciones aún más desfavorables, el Bono Social ofrece mayores reducciones en la factura de la luz. Es el caso de los consumidores vulnerables severos, y los consumidores vulnerables severos en riesgo de exclusión social.
Pertenecen a estos grupos las personas que cumplen los siguientes requisitos.
Consumidor vulnerable severo
- Renta anual por debajo del 50% de los márgenes citados anteriormente. Esto incluye las circunstancias especiales.
- Renta inferior a 2 veces el IPREM en caso de familia numerosa.
- Pensionistas que reciben la pensión mínima y cuya renta es menor o igual al IPREM.
Consumidor vulnerable severo en riesgo de exclusión social
- Son considerados consumidores vulnerables severos
- Reciben atención por parte de los servicios sociales de una Administración Pública de su comunidad o localidad que financian, cómo mínimo, el 50% de su tarifa PVPC.
Así pues, las bonificaciones aplicables son:
¿Cómo lo solicito?
Solicitar el Bono Social de Electricidad es un proceso que puedes llevar a cabo por correo electrónico, correo ordinario, teléfono o fax. Usando cualquiera de estos métodos tendrás que ponerte en contacto con una comercializadora de referencia, o lo que es lo mismo, una que actúe dentro del mercado regulado.
Se te solicitarán los documentos que demuestren que cumples con los requisitos indispensables. También es posible que te pidan alguna otra documentación básica como el libro de familia, el NIF o el NIE.